Por fin regresé, se que me extrañaron y no pudieron dormir bien porque hace rato no escribia nada. Todo se debió al matrimonio de mi hermano Jacobo, acontecimiento que congregó a toda la familia a venir a mi casa y por supuesto como buen miembro de familia que soy, cedí mi cuarto. Así que entre tanto alboroto cepillo, zapatos y maletas regadas no había encontrado el momento de sentarme a escribir y concentrarme.
Como algunos sabrán, (a otros les cuento), yo tengo dos hermanos, así que siempre imaginé la idea de como sería mi vida con una hermana. Lo de prestar la ropa, alegar por a quien le compraron los zapatos más bonitos y robarse al novio, nunca existió para mi. Ahora por fin tengo una. Quise compartir este momento tan especial para mi familia y para mi, sobretodo porque pasarán muchos años para que un momento así se repita en nuestra casa....
Entre muchas de las cosas que pasaron, me gané el ramo. Yo quería ese ramo. Y no lo hice porque me quiera casar (como dice la tradición la que lo gana es la próxima en pasar por el altar) de hecho muchas de las "solteras" que salimos a pelearnoslo ya tienen anillo en dedo, yo ni siquiera tengo el prospecto..o bueno.. eso no lo sé. El hecho es que mi naturaleza competitiva me exigía verles la cara de que no se lo ganaron. Yo simplemente lo quería, y me esforzé por el sin ninguna verguenza, porque de hecho se dirigía en otra dirección. Pero a la cuenta de tres, flexione mis piernas y pegué el salto de basquetbolista más increible que he hecho. Lo cogí en el aire. Las otras no tuvieron ni tiempo de pensar. Parecía un partido de voleibol donde yo fui la mejor jugadora, pese a que en colegio no daba mano con bola.
Ahora la fiesta ya pasó y todo volvió a la normalidad. Exigiré un sobrino todos los días hasta que me lo den, y si ese ramo significa algo, aún sigo con la idea de casarme prácticamente en una tienda, en chanclas y sin velo y si mis papás se portan bien los invito (es un chiste mamá se que estas leyendo esto, papá tu todavía estas tratando de entender como funciona "Facebud" así que por ti no me preocupo). Pero pase lo que pase, mi familia no podría faltar, estos días fueron increibles con mi familia tan especialmente costeña. Y ajá!
No hay comentarios:
Publicar un comentario